Es una injusticia que se inunde el mercado con naranjas de terceros países mientras las explotaciones onubenses se quedan sin recoger.
La situación clama al cielo. Con la connivencia de la Unión Europea, la campaña de cítricos de la provincia de Huelva viene siendo ruinosa debido a la masiva entrada de producto de Sudáfrica, Egipto y Turquía, países terceros que están, literalmente, reventando el mercado.
Con este escenario, los intermediarios están especulando a la baja con los precios a los productores y productoras de nuestra provincia, que en la mayoría de los casos están optando por no recolectar porque los costes superan el precio que se les ofrece y no es rentable.